martes, 17 de febrero de 2015

La caricatura

Un medio de expresión que no puede ser reprimido

En Ecuador se quiere reprimir a la caricatura; ella ofende al poder político a los gobernantes de turno, causa polémica cuando toca asuntos que afecta a la sociedad o cuando se denuncia actos de corrupción, a través de ella se expresa la forma en como su autor ve la realidad de lo que ocurre en nuestro entorno.

Lo que ha dicho el presidente es discriminación, la caricatura no
hay discriminación.

La caricatura es un discurso, que usa diversos modos semióticos para representar una realidad, este modo de comunicarnos tiene un tinte ideológico, genera crítica social y representa un instante, toma la vida de una manera cómica, los trazos y líneas informan, entretienen, no podemos censurarla, más bien debemos analizar su contenido ser críticos de nuestro propio actuar, la caricatura puede generar cambios y hasta reacciones fuertes, en quienes son representados en este arte.

Muchos critican a quien hace caricatura política, los juzgan y hasta insultan, pero te has preguntado ¿qué es la caricatura?  Algunos autores la definen como un proceso de exagerar la realidad, de tomar lo más representativo de los rasgos físicos y representarlos; en lo personal considero a la caricatura como una forma de expresión que representa una realidad de manera jocosa que ayuda a entender de manera rápida lo que pasa en la sociedad.

Un dibujo político, no insulta, no denigra, un dibujo político es un trazo con un contenido informativo, un dibujo es lo que su autor ve y quiere demostrar, quien se sienta ofendido es porque hay algo de verdad en lo que se representa y si así fuera sería necesario investigar, porque el dibujo se convertiría en una denuncia.

Muchos caricaturistas, escritores por temor a ser juzgados se han limitado y ya no denuncian o hablan sobre ciertos temas que al poder le disgusta, al sancionar a un caricaturista quieren intimidar a quienes se arriesguen hablar a escribir o dibujar, al poder no le interesa que los demás se expresen, el poder quiere ser la única voz, no somos un estado de opinión es correcto, nos encontramos en un Estado de derecho por lo tanto se están limitando nuestras libertades, se nos está poniendo una mordaza al tratar de intimidarnos o cuando somos objeto de persecuciones en las sabatinas que el señor presidente realiza.

Al parecer el poder tiene un enemigo y ese enemigo es la crítica, la denuncia, no toleran a quien haciendo uso de sus libertades pongan en tela de juicio y duda la obra que realizan, dice un viejo adagio quien nada debe, nada teme, ¿por qué tanto temor?

Amigo lector puede sacar tus propias conclusiones, podrás juzgar a quien hace su trabajo con honestidad si es culpable Bonil es el gobierno, pero desde mi visión considero que las libertades no pueden ser oprimidas, y que la ley debería aplicársela para todos por igual, de esta manera, respetamos la igualdad y equidad que el gobierno pregona en sus publicidades, en las sabatinas o en las cadenas que muy constantemente tengo que verlas interrumpiendo la programación normal, todos somos Bonil, queremos que la libertad de expresión se respete y que los insultos cesen, Todos somos Bonil porque la caricatura no es delito.